22/Enero/2012 CUBA.- El Gobierno de Cuba ha asegurado que Wilman Villar
Mendoza, el disidente político encarcelado que falleció el jueves tras 50 días en huelga de
hambre, "ni era disidente, ni estaba en
huelga de hambre".
A
través de una nota publicada en el portal Cubadebate,
el régimen liderado por Raúl Castro se hace eco del revuelo internacional que
ha causado la noticia y responsabiliza a "agencias de prensa extranjeras,
en particular de Miami" de una "campaña internacional
difamatoria" al asegurar que Villar era un opositor al régimen castrista y
llevaba 50 días sin comer ni beber en prisión. "Al respecto se
disponen de abundantes pruebas y testimonios que demuestran que no era un disidente
ni estaba en huelga de hambre", recoge el escrito.
"Cuba lamenta la
muerte de cualquier ser humano; condena enérgicamente las burdas
manipulaciones de nuestros enemigos, y sabrá desmontar esta nueva agresión con
la verdad y la firmeza que caracteriza a nuestro pueblo", concluye la nota
de Cubadebate.
Al contrario de lo que han dicho los
familiares de Villar Mendoza, entre ellos su esposa Maritza Pelegrino, que
aseguran que Wilman murió por las consecuencias de su ayuno, La Habana afirma
que el disidente falleció a raíz de un "fallo multi-orgánico secundario a
un proceso respiratorio séptico severo, que llevó al paciente a un shock por
sepsis".
También niega que algunos de sus familiares
no tuvieran acceso a la habitación donde se encontraba el cuerpo sin vida de
Wilman, de acuerdo con la denuncia de Maritza. "Sus familiares más
allegados estuvieron al tanto de todos los procedimientos que se emplearon en
su atención médica", recoge el comunicado.
Protesta por
cuatro años de condena
Villar Mendoza, que pertenecía al grupo Unión
Patriótica de Cuba, comenzó una huelga de hambre a raíz de conocer su condena a
cuatro años de cárcel por desacato y atentado contra la autoridad. Tras 50 días
en ayuno, en la noche del jueves se conocía la noticia de su muerte.
Varios grupos disidentes de la isla han
responsabilizado al Gobierno de lo sucedido, entre ellos las Damas
de Blanco, que han calificado de "asesinato" la
muerte de Villar, "por protestar y defender los derechos humanos".
También Elizardo Sánchez, portavoz de la Comisión
Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), denunció que el Gobierno de
Cuba "tiene toda la responsabilidad moral, política y jurídica" de lo
ocurrido, mientras que el ex preso político del 'Grupo
de los 75', José Daniel Ferrer, afirmó que "es un crimen
más de la tiranía, un nuevo caso al estilo del de Orlando Zapata Tamayo".
Último adiós
La esposa de Wilman Villar, la también
activista cubana Maritza Pelegrino, ha asegurado que tras la muerte de su
marido continuará su lucha contra las injusticias en Cuba y por el respeto a
los derechos humanos, según recoge la agencia Efe.
"No me puedo resignar, voy
a seguir luchando para que no se comentan esas injusticias a otras personas que claman por la
libertad y que claman por sus derechos", dijo Pelegrino a la emisora Radio
Fórmula.
La esposa del disidente cubano comentó que no
pudo asistir al entierro de su esposo porque no se sentía bien y le habían
tenido que dar sedantes.
Pelegrino destacó que las 'Damas de Blanco',
colectivo del que forma parte, "va a seguir protestando para que se haga
justicia y se cumplan los derechos humanos". Además, agradeció el apoyo
que ha recibido internacionalmente y de las organizaciones en el interior de la
isla.
Elizardo Sánchez, portavoz de CCDHRN, que sí
ha estado presente en el entierro celebrado este viernes en Contramaestre, ha
asegurado a Efe que el sepelio ha estado rodeado de "una
atmósfera de intimidación policial". Según sus palabras,
sólo han dejado entrar en la funeraria a ocho integrantes de las 'Damas de
Blanco' y a seis opositores, pero "a la hora de salir el cortejo fúnebre
la policía les bloqueó y no les permitió ir al cementerio, al que sólo pudo
llegar la familia".
"Había 6 opositores fuera de la
funeraria para sumarse al cortijo y fueron arrestados para impedirles que
fueran al entierro, sin contar entre 50 y 70 detenciones
preventivas" que se produjeron en las provincias de
Santiago de Cuba, Guantánamo, Granma y Holguín, denunció el disidente.
No hay comentarios. :
Publicar un comentario