SANTO DOMINGO
República Dominicana.-
La corrupción en los aeropuertos y puertos dominicanos con complicidad de empleados de la Dirección General de Migración ha sido un tema preocupante, durante años, para Estados Unidos.
Poco menos de tres meses después del cambio de Gobierno en el 2004, la embajada norteamericana en el país, dio nombres, incluyendo los de oficiales militares asignados a Migración y urgió sus cancelaciones y procesamientos.
El cable denominado como secreto habla de una reunión entre el embajador Hans Hertell y el Director de Migración, Carlos Amarante Baret, el 3 de noviembre en la que el diplomático le dijo al funcionario que las “organizaciones dominicanas de traficantes han desarrollado un alto nivel de experiencia en dicho tráfico, han creado extensas infraestructuras de apoyo logístico y reclutado una amplia banda de oficiales corruptos, incluyendo algunos coroneles y generales en las FF.AA.”.
Según el cable Wikileaks, la embajada recibió reportes de que los empleados de migración se estaban reagrupando luego del cambio de gobierno y han reiniciado sus actividades.
En ese encuentro Hans Hertell le dijo a Amarante Baret que los inspectores de migración planean sacar de contrabando a 20 niños a través del Aeropuerto del Cibao, en Santiago. Este grupo de inspectores apoya las organizaciones de contrabando de migrantes que cobran unos US$9,000 por cada dominicano sacado de contrabando.
El embajador le dio a Amarante Baret los nombres de tres de los inspectores. Amarante Baret dijo que tres más otro más han sido, o pronto serían, despedidos.
La trascripción dice que el embajador señaló que “algunos de los asignados políticamente que trabajan para Amarante Baret habían estado involucrados en el tráfico de migrantes en el pasado. Nombró algunos, incluyendo el coronel a cargo de los coordinadores militares y al coordinador militar en el Aeropuerto Las Américas en Santo Doming, junto al contacto de éste último en migración.”
Amarante Baret, según el cable, dijo que “había conversado recientemente sobre la corrupción con el coronel, de apellido Luna, y dijo que un subalterno de Luna envía migrantes ilegales a países europeos. Se quejó de que tan pronto él despide un militar corrupto, otro llega. Añadió que el coordinador militar en Las Américas fue interrogado el mismo día sobre un caso de pasaporte”.
“El Agregado de Defensa (de la embajada) y Baret conversaron sobre si permitir que las Fuerzas Armadas tomen acción contra su propia gente o si debería involucrar al Procurador General”.
En el este cable, el embajador dijo que el aeropuerto de Punta Cana, “es otra área preocupante. Nombró personas, incluyendo al supervisor que transfirió un conocido traficante de personas a Punta Cana y al supervisor de un turno en Migración que trabaja con un contacto militar para traficar con migrantes.” , Amarante Baret según el documento, dijo que “conocía al militar y que pensaba que era un hombre serio, religioso y dedicado a su familia”.
Según la trascripción diplomática, el embajador reclamo que “en el pasado, Migración nunca había procesado a los traficantes de migrantes.” (e) “Instó a Baret a que llevara a cabo un cambio inmediato en esa área. Acto seguido señala que Baret dijo “que un amigo suyo fue abordado por el hermano del ex director de Migración Siquio Ng de la Rosa, para proponerle traer de contrabando a entre cuatro y cinco ciudadanos de la Republica de China hacia República Dominicana”.
Durante la reunión, el encargado de negocios “le instó a Baret a no permitir la práctica usual de mover a los corruptos a una ubicación distinta”, señalando “el posible impacto sobre la cooperación entre Estados Unidos y República Dominicana si República Dominicana fuera situada en el escalón tres luego de la evaluación en febrero de 2005 de sus esfuerzos contra el Tráfico de Personas”.
Según el documento, Amarante Baret dijo que “no resultaba fácil reunir evidencia para un juicio, y el encargado de negocios lo exhortó a que se impusieran sanciones administrativas como segunda opción”.
Baret dijo que “tenía un equipo siguiendo el rastro de las organizaciones de traficantes”. Mientras que el Agregado de Defensa de la Embajada “dijo que debemos trabajar junto con las Fuerzas Armadas para investigar estos casos”. De acuerdo al documento Baret dijo que “reunir evidencia contra Luna, por ejemplo, sería difícil”. A lo que el agregado legal de la embajada “sugirió grabar las conversaciones y filmar las reuniones”.
El director de Migración dijo que “eso era posible, pero que despediría algunas personas cuyos nombres había recibido”. Añadiendo que “Luna era un caso más difícil, porque tenía buenas conexiones”.
Baret dice la trascripción dijo que “estaba creando su propia red de información y que la embajada le era de gran ayuda”. Señalando “vamos a movilizarnos en esto”.
“El director de la Sección de Asuntos de Droga (NAS) le recordó a Baret la gravedad de la descertificación en el Tráfico en Personas y dijo que el gobierno estadounidense no vería excusa alguna para República Dominicana debido al reciente cambio de gobierno”.
De su lado, Baret “pidió entrenamiento adicional del Departamento de Seguridad Fronteriza (DHS) y el Agregado le prometió apoyo”.
Al final del cable dice, en una nota actualizada.
“El 5 de noviembre el director de la Sección de Asuntos de Droga se enteró que el coronel Luna y otros cuyos nombres dio el embajador fueron despedidos el día antes.”
“Tarde en la mañana, (añade el documento) el secretario de las FF.AA., Sigfrido Pared Pérez, le confirmó al director de la Sección de Asuntos de Droga que Baret lo había visitado el día anterior y habían trabajado en conjunto para resolver algunos problemas de personal”.
Acto seguido mencionan un artículo del Diario Libre del 8 de noviembre del 2004, o sea publicado 5 días después de la reunión, diciendo que Migración “había despedido 37 oficiales que habían sido asignados a cinco aeropuertos y la terminal del servicio de ferry.
En si el artículo dice que fueron despedidos “en medio de denuncias de pasajeros y de deportados de que fueron extorsionados en esas dependencias”. Añadiendo que el director de Migración “dispuso la cancelación de varios inspectores de la terminal, que supuestamente junto a militares miembros de la Oficina Coordinadora extorsionaron con US$240 a una señora que llegó devuelta de España.
Al artículo añade “Se supo que, incluso, oficiales superiores designados por las Fuerzas Armadas fueron sustituidos en Las Américas, Gregorio Luperón, Puerto Plata, Cibao, Santiago, La Romana, Punta Cana y El Ferry”, aunque no dan los motivos.
Al final dice el cable, la embajada tiene suma confianza en varios altos miembros del actual gobierno. Todavía no se tiene una opinión definitiva sobre Amarante Baret, pero las primeras impresiones son buenas.
Si su desempeño sigue equiparándose con sus palabras, finalmente podría tomarse acción contra las redes de tráfico, similares a la mafia, cuyos nefandos negocios socavan el control de la frontera dominicana y amenazan la seguridad nacional de Estados Unidos.
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